OPINIÓN

Viñas de Garza y Suma Tres

CONVINO / Antonio Laveaga EN MURAL

3 MIN 00 SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Conocí a Amado Garza a principios de siglo, había quemado las naves en su natal Monterrey y como proyecto de vida -no me gusta usar la palabra retiro- se fue a Ensenada, de donde es Ana Lilia, su esposa. Compró unas tierras en el Valle de Guadalupe, Rancho El Mogor, para ser exactos, y se puso a hacer vino, que era una de sus pasiones.