En 1953 se publicó el libro "Balas perdidas", crónica de una heroica campaña legal planteada desde lo más calificado del realismo ciudadano, la cual pretendía que una parte de la Constitución Mexicana existente fuera corregida, para respetar con ello muchos de los compromisos adquiridos por nuestro país al haber firmado, durante la Asamblea General de la ONU el 10 de diciembre de 1948, la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH).