LA CACAREADA "liberación" que anunció Donald Trump el 2 de abril duró apenas siete días. ¡Y qué bueno que fue así! De acuerdo con analistas económicos, el presidente norteamericano tuvo que dar marcha atrás en su guerra arancelaria porque él mismo se convirtió en un "panican", que fue como llamó a quienes cayeron en pánico al ver desplomarse las bolsas del mundo.