En una sesión de la Comisión Permanente, un joven diputado de Morena esgrimía como argumento que eran mayoría y que por lo tanto sus opiniones tenían que tener prevalencia. La senadora Beatriz Paredes le replica, en palabras más o menos, que la mayoría no es argumento y que cuando se esgrime como tal, se cancela toda posibilidad de diálogo y nunca da buenos resultados.