El creciente conflicto entre Enrique Alfaro y Raúl Padilla derivó en un nuevo y complicado capítulo en la política local, en lo que parece un rompimiento sin retorno entre Pablo Lemus y Movimiento Ciudadano (MC), o más bien, entre Lemus y la única persona que manda en el partido naranja, sin cuya venia nadie se mueve.