JUSTICIA
Recupera libertad 'La Matabellas'
Grupo REFORMA
Guadalajara, México (25 noviembre 2014) .-00:00 hrs
Sólo los recuerdos de su vida en prisión le quedarán a Miriam Yukie Gaona, apodada "La Matabellas", pues ayer recuperó su libertad tras de 12 años y cuatro meses de encierro.
Cerca de las 8:00 horas, la seudocirujana firmó su salida y recorrió el único camino que conduce del Reclusorio Femenil hasta la Carretera Libre a Zapotlanejo y ahí dejar su "hogar" en Puente Grande.
La falsa doctora tuvo que pagar hasta el último día de su condena, pues incumplió con el pago de 554 mil pesos como reparación del daño a cinco de sus víctimas y no pudo solicitar libertad anticipada como plantea el Código de Procedimientos Penales de Jalisco, agregaron fuentes consultadas, pese a que tenía expediente de buena conducta.
No obstante, "La Matabellas" todavía no puede respirar tranquila, pues las afectadas por la práctica sin licencia de tratamientos estéticos podrían recurrir a la vía Civil y demandarla para que cumpla con la indemnización.
La acusada se ostentaba como médico graduada de la Universidad de Sinaloa y atendía a sus pacientes, inyectándoles presuntamente colágeno de bovino en senos, glúteos y pantorrillas para acrecentar su volumen, lo que les causó daños. Se le acusó de usurpación de funciones y lesiones.
En la cárcel, Gaona Padilla se había convertido en una líder entre las internas y gozaba del respeto de las custodias y personal administrativo.
Cerca de las 8:00 horas, la seudocirujana firmó su salida y recorrió el único camino que conduce del Reclusorio Femenil hasta la Carretera Libre a Zapotlanejo y ahí dejar su "hogar" en Puente Grande.
La falsa doctora tuvo que pagar hasta el último día de su condena, pues incumplió con el pago de 554 mil pesos como reparación del daño a cinco de sus víctimas y no pudo solicitar libertad anticipada como plantea el Código de Procedimientos Penales de Jalisco, agregaron fuentes consultadas, pese a que tenía expediente de buena conducta.
No obstante, "La Matabellas" todavía no puede respirar tranquila, pues las afectadas por la práctica sin licencia de tratamientos estéticos podrían recurrir a la vía Civil y demandarla para que cumpla con la indemnización.
La acusada se ostentaba como médico graduada de la Universidad de Sinaloa y atendía a sus pacientes, inyectándoles presuntamente colágeno de bovino en senos, glúteos y pantorrillas para acrecentar su volumen, lo que les causó daños. Se le acusó de usurpación de funciones y lesiones.
En la cárcel, Gaona Padilla se había convertido en una líder entre las internas y gozaba del respeto de las custodias y personal administrativo.
