El mes pasado fue muy halagador para mí, ya que asistí como juez a tres concursos: el primero de destilados de Latinoamérica, otro de vinos de este País y el último de raicillas. La cereza del pastel fue que recibí un reconocimiento por mi trayectoria de parte del Festival de Vino y Maridaje Vinoma, del que en su momento ya escribí.
Tiene 26 años de experiencia, es sommelier por escuelas de Italia, España y México, y participa cada año como juez de concursos nacionales de vino. La docencia forma parte de sus actividades y ha incursionado en la creación de etiquetas.