Año de 1577. Un grupo de hombres de la Europa se dirigían a buscar oro en el norte de la Nueva España. Tras cruzar el desierto se toparon con un oasis de verdor, un valle en cuya altura brotaba un salto de agua pequeñito. Era el 25 de julio, día del apóstol Santiago. El clima bonancible, la tierra promisoria, la abundancia de manantiales los invitaron a quedarse. Fundaron una población a la que dieron el nombre de Santiago del Saltillo.
Armando Fuentes Aguirre, "Catón". Nació y vive en Saltillo, Coahuila. Licenciado en Derecho; licenciado en Letras Españolas. Maestro universitario; humorista y humanista. Sus artículos periodísticos se leen en más de un centenar de publicaciones en el País y en el extranjero. Dicta conferencias sobre temas de política, historia y filosofía. Desde 1978 es cronista de la Ciudad de Saltillo. Su mayor orgullo es ser padre de cuatro hijos y abuelo de 13 nietos.
LEE SU TEXTO AQUÍ DIARIAMENTE