Yo no imaginaba que recordara tan bien semejante dramonón, que preservara las tramas de la historia y el sentido moral del conjunto
¡Madres!
NEGRO Y CARGADO / José Israel Carranza EN MURAL
4 MIN 30 SEG
Mañana de sábado, idónea para "la dicha inicua de perder el tiempo", como sabiamente precisó Renato Leduc. Prendemos la tele, vamos a recorrer los canales desde el principio, y enseguida quedamos atrapados en el 2. ¡Ah, la tele abierta! Si uno tiene la fortuna de poder suscribirse a cualquier plataforma de streaming, o si al menos cuenta con internet en cualquier dispositivo para ver ahí lo que sea, difícilmente habrá razones distintas del azar o del destino para regresar a los canales que, sin embargo, continúan entreteniendo a millones de mexicanos. Supongo que es lo común en mi generación: crecimos delante de una oferta televisiva reducida a cuatro o cinco canales, y apenas irrumpieron otras posibilidades, fuimos volcándonos a ellas irrefrenablemente, al grado insensato de -es mi caso- pagar hoy no solamente el internet y la tele por cable, sino también cada vez más plataformas atestadas de porquería...