En los años cuarenta del pasado siglo, acostumbraban mis padres llevar a la familia en tardes de domingo a Los Arcos, entrada de Guadalajara por el poniente, monumento construido por el ingeniero Aurelio Aceves, inaugurado como parte de las celebraciones del cuarto centenario de la fundación de la Ciudad, en 1942, siendo Gobernador del Estado Silvano Barba González.