Apenas Chivas se ha recostado en la cama. No ha cerrado los ojos por más de 10 segundos. Todavía está en sus cinco sentidos; aún escucha todo.<BR><BR>Está lejos, muy lejos de un sueño profundo... y ya tiene pesadillas. Basta un parpadeo para que flashazos de inquietud le llenen la mente en...