La industria del deporte en México y en el mundo camina por una endeble cornisa. Se aferra con las uñas a la "nueva normalidad". Cualquier movimiento brusco, cualquier error o cualquier exceso de quienes la integran o forman parte de ella directa o indirectamente, podría derrumbar todo el esfuerzo que se ha hecho por mantenerla de pie en los inestables terrenos a causa del Covid-19.