El Presidente López Obrador aprovechó ayer la "mañanera" para subirse a la coyuntura del quinto aniversario de la desaparición de los estudiantes de la Normal Isidro Burgos de Ayotzinapa. No lo hizo tan sólo a través de una declaración o de un discurso, sino de un verdadero montaje propagandístico que lo llevó incluso a portar una camiseta alusiva a los normalistas desaparecidos.