En un mundo tan dinámico, donde la tecnología, la innovación y el emprendimiento social son un eje fundamental para el desarrollo sostenible y la solución de complejas problemáticas globales, las organizaciones de la sociedad civil (OSC), tradicionalmente enfocadas en el bienestar social, la justicia y la equidad, son un brazo social indispensable para generar mejores condiciones para poblaciones en situación de vulnerabilidad. Sin embargo, para maximizar su impacto, es crucial que estas organizaciones incorporen herramientas y estrategias de innovación en sus procesos de atención y sus proyectos. Este enfoque no sólo amplifica su capacidad de respuesta frente a los desafíos actuales, sino que también asegura su relevancia y sostenibilidad a largo plazo.