OPINIÓN
Roberto Gómez Junco EN MURAL
MIN SEG
Como sucede cada seis meses, los 18 equipos de Primera División se preparan y tratan de armarse lo mejor posible, acorde con los respectivos objetivos, para encarar el "Torneo de Clausura" con el que iniciarán el 2012.
Los Pumas con un plantel evidentemente limitado, pero dispuestos a ser tan competitivos como hace dos torneos; las Chivas con similares limitaciones, pero quizá con mayores alcances; el América aparentemente fortalecido en la cancha, en la banca y en la mesa, y el Cruz Azul casi casi con el mismo poderoso equipo con el que otras veces se ha quedado en la orilla.
Los Tigres con pequeños ajustes en un plantel que parece contar con lo necesario para buscar el bicampeonato, y el Monterrey batallando para conservar su plantel, y en consecuencia aspirar a levantar al equipo.
Conjuntos como Santos Laguna, Toluca, Morelia y Pachuca, con la intención de pelear por ese protagonismo que en los últimos tiempos normalmente han asumido.
Los Tecos y el Atlas en una dramática lucha por la permanencia en Primera; y el Atlante, el Querétaro y sobre todo los Xoloitzcuintles de Tijuana empeñados en que esa lucha termine siendo exclusivamente tapatía.
Los Jaguares, el Puebla y el San Luis prácticamente a salvo del descenso, pero suponemos que con aspiraciones algo más elevadas que la simple permanencia en el máximo circuito. Y así cada uno de los 18 equipos se prepara como puede para encarar el próximo torneo a partir del 6 de enero.
Todo eso, adornado por la supuesta intención de los federativos de conformar una Liga de Primera División independiente de la FMF; algo así como la Premier de Inglaterra, según dicen, con clubes más sólidos y equipos más competitivos, aunque quizá con menos participantes.
Una idea que tiene su origen en la convicción de que manejar un equipo de futbol no es ni puede ser negocio, lo que según esa particular visión queda demostrado con la dificultad para encontrar generosos empresarios que le entren al juego.
Por eso la inequitativa y por lo tanto indeseable multipropiedad no sólo es permitida, sino que además los federativos no se cansan de agradecer la generosidad de los multipropietarios, dispuestos a perder su dinero con tal de seguir brindándole a México el espectáculo del futbol.
Está bien que hoy sea 28 de diciembre, pero no abusen.
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