OPINIÓN
El Pulso del Fin de Semana
Jaime Inchaurrandieta EN MURAL
0 MIN 30 SEG
El pasado domingo en la NFL fue todo un musical, cargado de emociones y recuerdos que parecen sacados de una playlist épica.
En Filadelfia, nuestro querido José Alfredo Jiménez pudo haberle compuesto a los Commanders: "Este es el corrido del caballo negro que en un día domingo feliz arrancaba. Iba con la mira de llegar al Super Bowl, habiendo salido de Detroit. Su noble jinete Jayden Daniels le quitó la rienda, le quitó la silla y se fue a puro pelo".
Pero la historia tuvo un final distinto. Las Águilas, al ritmo de "¡Vuela, Vuela!", surcaron el cielo con un ataque terrestre devastador, anotando no menos de siete touchdowns por esa vía. Mientras Filadelfia celebraba, los Commanders, abatidos, parecían cantar con Luis Miguel: "Qué pena, nuestra historia pudo ser fantástica".
En Kansas City, los Chiefs dejaron claro por qué son los reyes actuales de la NFL. A ritmo de "Con dinero y sin dinero, hago siempre lo que quiero", echaron fuera a los Bills quienes llenos de años de frustración parecían dedicarle al ansiado trofeo Lombardi la desgarradora canción "No hay nada más difícil que vivir sin ti. Sufriendo en la espera de verte llegar".
Sin embargo, no todos comparten la alegría del Reino de los Chiefs. Para aquellos que soñábamos con ver un nuevo campeón de la AFC, el lamento fue inevitable. Mientras veíamos a Josh Allen y compañía caer, nos descubrimos cantando con Marco Antonio Solís: "Si no te hubieras ido sería tan feliz".
Finalmente así, como diría Soda Stereo: "Nada nos libra, nada más queda".
El domingo 9 de febrero, las Águilas y los Chiefs se verán las caras nuevamente en el Super Bowl. Andy Reid tendrá la oportunidad de grabar su nombre en los libros de historia si consigue ganar su tercer Lombardi consecutivo. ¿Será capaz? ¿O veremos volar a Filadelfia hacia la gloria? Por aquí lo comentaremos la próxima semana.
En Filadelfia, nuestro querido José Alfredo Jiménez pudo haberle compuesto a los Commanders: "Este es el corrido del caballo negro que en un día domingo feliz arrancaba. Iba con la mira de llegar al Super Bowl, habiendo salido de Detroit. Su noble jinete Jayden Daniels le quitó la rienda, le quitó la silla y se fue a puro pelo".
Pero la historia tuvo un final distinto. Las Águilas, al ritmo de "¡Vuela, Vuela!", surcaron el cielo con un ataque terrestre devastador, anotando no menos de siete touchdowns por esa vía. Mientras Filadelfia celebraba, los Commanders, abatidos, parecían cantar con Luis Miguel: "Qué pena, nuestra historia pudo ser fantástica".
En Kansas City, los Chiefs dejaron claro por qué son los reyes actuales de la NFL. A ritmo de "Con dinero y sin dinero, hago siempre lo que quiero", echaron fuera a los Bills quienes llenos de años de frustración parecían dedicarle al ansiado trofeo Lombardi la desgarradora canción "No hay nada más difícil que vivir sin ti. Sufriendo en la espera de verte llegar".
Sin embargo, no todos comparten la alegría del Reino de los Chiefs. Para aquellos que soñábamos con ver un nuevo campeón de la AFC, el lamento fue inevitable. Mientras veíamos a Josh Allen y compañía caer, nos descubrimos cantando con Marco Antonio Solís: "Si no te hubieras ido sería tan feliz".
Finalmente así, como diría Soda Stereo: "Nada nos libra, nada más queda".
El domingo 9 de febrero, las Águilas y los Chiefs se verán las caras nuevamente en el Super Bowl. Andy Reid tendrá la oportunidad de grabar su nombre en los libros de historia si consigue ganar su tercer Lombardi consecutivo. ¿Será capaz? ¿O veremos volar a Filadelfia hacia la gloria? Por aquí lo comentaremos la próxima semana.
