Apenas el 10 de febrero pasado, Jaime Ordiales, Rodrigo Ares de Parga y Diego Cocca posaban para los fotógrafos durante el acto de presentación del argentino como timonel de la Selección Mexicana. Cuatro meses después los tres están fuera, prueba inequívoca de la inestabilidad de un sistema que no se ha cansado de dar bandazos.