EN UNA verdadera democracia, ni se gana todo ni se pierde todo. Y tampoco se gana o se pierde para siempre. Así que más allá de los resultados, lo que ayer se vivió en las casillas electorales instaladas en <B>Jalisco</B>, fue una verdadera fiesta cívica.<BR><BR>LA SOCIEDAD habló y se hizo...