OPINIÓN

La corrupción no se puede erradicar con discursos o deseos, sino con un diagnóstico correcto que luego se traduzca en acciones consecuentes

Corrupción

Luis Rubio EN MURAL

4 MIN 30 SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
"Si no suena lógico, suena metálico", corre un popular refrán. En México cambian los gobiernos pero no las prácticas ni las costumbres. La corrupción podrá ser un mal, un factor cultural o una característica, pero nunca un delito. Muchos son acusados de corrupción, pero nunca por la corrupción, sino como excusa por alguna violación política de otro orden o porque es una forma eficaz para eliminar contendientes, enemigos o rivales. El presidente repetidamente afirmó que no sería "tapadera de nadie", pero eso dejó de ser válido cuando los presuntos involucrados comenzaron a ser cercanos. El punto de fondo es que la corrupción no se puede erradicar con discursos o deseos, sino con un diagnóstico correcto que luego se traduzca en acciones consecuentes.